En un comunicado de prensa los obispos de Colombia expresan su dolor ante el sufrimiento que produce la violencia en las regiones. La primera preocupación de la Iglesia colombiana es la situación humanitaria, aseguran que la vida humana debe ser protegida, por eso se necesitan demostraciones de paz por parte de las partes en las mesas de diálogo.
Además afirman que la paz se construye demostrando compromiso en la protección y respeto a la población, por eso la Iglesia se empeña en ayudar a generar condiciones para que haya cese al fuego tanto en lo rural como urbano.
Los Obispos colombianos llaman e invitan a no perder el rumbo en la construcción de la paz, con tres cosas importantes: preservar la vida y la paz; la continuación de la construcción de la paz y los acuerdos y el acompañamiento a los que sufren, especialmente a sus familias.
Puede leer y descargar el comunicado completo en el siguiente link: